Ajustando el Bagua
Por Heluo
Una lectura de las orientaciones en el hemisferio Sur como en el hemisferio Norte mide el campo magnético de la tierra. Los mapas de las Estrellas Volantes del Feng Shui están basados en la lectura magnética de la brújula. La brújula mide el campo magnético de la tierra, más que el patrón del sol, realidades climáticas o estaciones.
Rápidamente el profesor australiano Roger Green se tomó la responsabilidad de estudiar las supuestas diferencias entre los hemisferios y -basado en las aparentes diferencias climáticas y estacionales– ajustó el Ba Gua para encajar las estaciones con el hemisferio Sur.
Basado en la idea del crecimiento y mengua de las estaciones elaboró un sofisticado programa:
- El Ba Gua ajustado a las estaciones del H. Sur.
• Ajustando el comienzo del año del Qi de las Nueve Estrellas al 6 o 7 de Agosto para el H. Sur. La razón fue que el año debe empezar al inicio de la Primavera, lo cual es en Agosto para el H. Sur.
• Ajustando el ciclo de las 60 combinaciones de Troncos Celestes y Ramas Terrestres (astrología china) para el H. Sur, así que podría haber una diferencia de cinco años entre el año de la Rata en ambos hemisferios. Año 1960, Rata para el H. Norte podría ser Cabra (1995) para una persona nacida en el en el H. Sur.
• Donde se encuentra la Rata en el Luo Pan visto desde el H. Norte ahora encontraríamos el Caballo para el H. Sur.
• Tradicionalmente las Ramas Terrestres (los 12 animales chinos) funcionan en el Luo Pan en el sentido de las agujas de un reloj. Roger Green demostró que el movimiento es al revés.
Sin ninguna referencia al campo magnético terrestre, él deja fuera las energías que se muestran en el Bagua:
“El representa los ocho trigramas primordiales, acomodados como un mandala para encajar las cualidades energéticas de las estaciones, colores, direcciones, situaciones de vida y muchas otras asociaciones”.
En el Ki de las Nueve Estrellas el año empieza cuando el sol alcanza los 15° de Acuarius. El sol alcanza los 15° en ambos hemisferios el 3, 4, o 5 de febrero de cada año. No podemos decidir que el año empieza cuando el sol alcanza los 15° de Leo sólo porque nosotros vivimos en el H. Sur.
La razón aparente es que en los textos chinos se establece que el año empieza en el ‘Li Qun’ o ‘el comienzo de la Primavera ‘. La Primavera aquí se relacionó con el H. Norte, más que Primavera, el año es definido con el comienzo de los meses elemento Madera.
Los meses Madera son en Febrero, Marzo y Abril en ambos hemisferios, porque la Madera está en plenitud durante estos meses alrededor de todo el planeta.
Yo tengo la gracia de vivir en Holanda donde vive mucha gente del H. Sur. Yo he realizado más de 1.400 lecturas del Ki de las Nueve Estrellas desde 1988 y siempre he estado pendiente ante cualquiera diferencia y he hecho cientos de cartas de 4 Pilares desde 1994.
Cada vez que trabajo con clientes nacidos en el H. Sur, les pido que consideren dos Ki de las Nueve Estrellas y dos signos animales chinos por un tiempo, en la privacidad de sus hogares, pero todos ellos vuelven diciendo que no reconocen sus temperamentos como lo muestran los signos del H. Sur. No baso mis observaciones en los descubrimientos de estos clientes, quienes por supuesto la mayoría de ellos son principiantes en estos estudios.
Yo investigo sus historias y examino lo que ellos me dicen usando dos tablas del Ki de las Nueve Estrellas o calculo dos cartas 4 Pilares, uno para cada hemisferio. Y nunca he encontrado argumentos sólidos para una diferencia entre ambos hemisferios.
Además, he tenido la suerte de hacer muchas lecturas de 4 Pilares en Brasil para personas que ya se habían hecho lecturas antes. Pienso que he sido capaz de hacer lecturas, pero nunca he visto las respuestas como las que recibí de estas personas, y como finalmente sus vidas tomaron su lugar. He visto muchas cartas completamente equivocadas, lo que puede ser desastroso si usted entiende la dinámica del ‘dios Útil’ y lo que puede suceder cuando las asesorías están mal hechas.
Copyright © 1994 Feng Shui Network Netherlands/Heluo
Traducción: Lucía Boero